La cantante y su esposa, la presentadora Inmaculada Casal aún siguen sufriendo las consecuencias del terrible robo que sufrieron en su propia casa el pasado mes de agosto, donde fueron maniatadas e intimidadas con violencia para acabar llevándose cerca un 1 millón de euros de botín.
Ahora la tonadillera ha acudido al programa de su gran amigo Bertín Osborne, en Canal Sur, ‘El show de Bertín’, y ha concedido la entrevista más personal y sincera, en torno al asalto que sufrió y por el que está acusado su propio sobrino, Antonio Tejado, como autor intelectual del robo. “Te agradezco que estés aquí porque en los momentos complicados de nuestras vidas nos gusta ver a los amigos”, con estas palabras la recibía Bertín, y la cantante le respondió: “Por eso he venido a verte, porque tú tampoco estabas muy allá… y al juntarnos, algo bueno sale”.
En la entrevista María del Monte ha confesado al presentador que “Estoy bien, sin entrar en detalles. En la vida hay que arrancar, hay que vivir”. Y a pesar del mal momento que atraviesa ha explicado que se alegra de estar bien, “Sobre todo cuando tienes salud ves que todo lo demás tiene arreglo. Yo tuve la desventaja de ver cómo se me iba gente a la que quería y no podía hacer nada, y todo lo demás ya está por debajo. La nota de corte está más bajita”.
María del Monte habla de lo que ha provocado su sobrino
Cuando el presentador se compadeció por la situación que le había tocado vivir, con su sobrino de por medio, la artista le cortó de inmediato, “De pobre, nada. Yo no soy digna de lástima, de pena ni de nada. Sin lugar a dudas en la vida habrá mucha gente que esté mucho peor que nosotros, así que no tenemos derecho a quejarnos”. Unas duras palabras de la cantante que tuvieron un remate bastante impactante.
Y es que María ha desvelado los problemas psicológicos que ha tenido tras el incidente, “Hay cosas a las que le tienen que tomar sitio. A mí me han quitado cosas, pero no quiero que me quiten la vida. No me van a quitar a mí. Lo más valioso es tenerme a mí, no puedo perderme”. Asimismo ha reivindicado la figura de los profesionales para superar estos momentos, “Tenemos una cultura reacia a pedir ayuda a los profesionales, pero yo no escatimo. Creo que hay personas que están ahí para ayudar, y la ayuda hay que pedirla para cuando se necesita. Y me está sirviendo, claro. Ya te daré yo un teléfono”, le dijo a Bertín para cerrar la entrevista.