Terrible bronca en un centro comercial por 'achuchar' a un perro de asistencia

Una entrenadora de perros de asistencia se enfrentó a una mujer que quería acariciar a los animales mientras entrenaban... ¡Y se armó la Marimorena!

09 de Enero de 2019
Terrible bronca en un centro comercial por 'achuchar' a un perro de asistencia
Terrible bronca en un centro comercial por 'achuchar' a un perro de asistencia

¡Alucinante! Es la mejor descripción que puede hacerse del surrealista momento que se vivió en un centro de comercial de Pensilvania. Una entrenadora de perros de asistencia pidió a una madre con su hija que no tocaran a los perros para que no se despistaran de su trabajo, y la discusión que se montó se ha hecho viral.

La cuidadora Megan Stoff fue la encargada de publicar el vídeo en Facebook, en el que puede verse cómo una mujer con su hija en brazos entra en brote al recibir un ‘no’ por respuesta sobre tocar a los perros de asistencia. Somos conscientes de que son adorables y dan ganas de achucharlos, pero hay que tener un poco de respeto…

“Tuve esta loca experiencia ayer en un centro comercial, donde una señora me preguntó si podía acariciar a los perros. La gente nos pregunta todo el tiempo, así que solo dije ‘no’. Todos los perros están trabajando, así que me corresponde responder. Y se fueron. No es gran cosa, ¿verdad? Pero esta señora hizo todo lo posible para regresar con su hija y gritarnos por decir ‘no’ en vez de decirle ‘no, lo siento, están entrenando’. Y que deberíamos tener una señal o algo así”, contó Megan Stoff a sus seguidores en Facebook.

¿Se refiere a los 20 parches en mi perro que dicen ‘no acariciar’? Hay gente que cree que tiene derecho a todo. Incluso hicieron llamar a la seguridad del centro comercial porque dijimos que no podían acariciar a los perros mientras trabajaban. La seguridad dijo que la señora estaba llorando. Mucho hostigamiento por solo decir que no. Este vídeo es público y se puede compartir. No hay sentido común”, zanjó la cuidadora. A continuación puedes ver el vídeo. ¡Una locura!