El grupo Zeta está en venta desde hace años, pero en plena crisis del papel parece complicado encontrar a un comprador que esté dispuesto a asumir la deuda del grupo que ronda los 100 millones de euros y los 15 que pide el propietario, Antonio Asensio, para él.
El grupo está en manos de los bancos, que financian su deuda. Y los activos de El Periódico y Sport conforman los productos más golosos del escaparate de Zeta para los posibles pretendientes. (Los tres candidatos que aspiran a apoderarse del imperio de Zeta)
La mejor oferta por El Periódico es la de Jaume Roures
Y entre los posibles compradores dispuestos a a apostar por los restos del grupo Zeta se encuentra Jaume Roures, el amo de Mediapro, que por sus vinculaciones indepoendentistas no está bien visto ni en las altas esferas políticas ni entre los propios bancos que negocian la deuda del grupo. (Los dos medios que quiere comprar Jaume Roures)
Hasta ahora la mejor oferta para quedarse todos los productos periodísticos del grupo -Asensio no quiere trocear su imperio- es la de Jaume Roures, algo que genera preocupación. Tanto que desde círculos políticos de alto nivel se han propuesto incentivar otras alternativas.
La primera, la de Javier Moll, presidente de Prensa Ibérica, que llegó a ofrecer 35 millones, pero que finalmente se tiró para atrás después, incluso, de que Pedro Sánchez en persona intentara convencerle para afrontar la operación. (¿Qué secreto esconde Jaume Roures en su casa?)
El editor de El Heraldo estudia la compra de Zeta
Ahora existen negociaciones con el grupo aragonés Henneo Media, editor del Heraldo de Aragón, 20 Minutos y La Información como alternativa a la mejor oferta recibida hasta ahora procedente del amo de Mediapro y que asciende a 60 millones.
CaixaBank y Santander lideran el pool bancario que gestiona la deuda del grupo, que ya se aproxima a los 100 millones de euros. Ninguno de los dos bancos ve con buenos ojos la oferta de Roures, a pesar de ser la mejor, y negocian con Henneo, sin descartar todavía a Moll, para que sean ellos y no Roures quienes se queden con el imperio de Asensio. Y para favorecer la operación los bancos están dispuestos a hacer una quita de entre el 50 y 70% de la deuda con el fin de aclararle el panorama al posible comprador.
Cualquiera menos Roures, esa parece ser la consigna en los bancos y en la clase política.