Nada es porque sí. Tampoco son fruto del azar las constantes "casualidades" que se producen en los partidos que juega el Real Madrid en la Liga española, generalmente en su contra. Todo tiene una explicación.
Es la misma explicación que tiene la "suerte" que acompaña al Barça con las decisiones de los árbitros y el VAR. En la zona noble del Bernabéu no hay lugar para la duda: "Rubiales nos la tiene jurada". Las constantes equivocaciones de los árbitros en contra del Real Madrid y a favor del Barcelona parecen confluir en una persona: Luis Rubiales, el presidente de la Federación Española de Fútbol.
Es un tema que tiene muy preocupado a Florentino Pérez, que lo ha debatido con su círculo más próximo de directivos. Existe en el Real Madrid el convencimiento de que el presidente de la Federación, Luis Rubiales, no le ha perdonado a Florentino Pérez el "hurto" de Lopetegui a 48 horas de iniciarse el Mundial de Rusia el pasado verano y el Real Madrid está pagando ahora las consecuencias.
Rubiales no le ha perdonado a Florentino lo de Lopetegui
Los árbitros dependen de la Federación y su jefe es Luis Rubiales, curiosamente el hombre que le declaró la guerra a Florentino Pérez por sentirse agredido cuando el presidente blanco fichó a Lopetegui... para después del Mundial.
El presidente blanco pensó que aceptando la oferta de Rubiales de entrar a formar para de su Federación como directivo quedarían resueltas sus diferencias, pero el día a día está demostrando que la herida sigue abierta y que en la Federación no perdonan.
Florentino se ha quejado enérgicamente a la federación por los constantes errores arbitrales en su contra que tienen mucho que ver con la actual situción del Real Madrid en la tabla, a diez puntos del líder, pero también es consciente de que así no conseguirá nada. Sus asesores directos le han aconsejado que lime asperezas con Rubiales y que propicie un acercamiento para recuperar la relación cordial con la Federación. Es el único camino para que, como mínimo, los árbitros dejen de perjudicar. No se trata de salir beneficiado con sus decisiones. Basta con que no perjudiquen.
Y la última jornada, con dos penaltis no señalados a favor del Real Madrid y un gol anulado de manera injusta al Getafe, rival del Barça, confirma que la espiral antimadridista de la Federación va a más. En las próximas horas Florentino intentará acabar con esta situación, aunque tenga que comerse su orgullo y claudicar ante el presidente de la Federación, al que considera un advenedizo.