¿Quién protege a Llarena de los desalmados? ¡Está en el centro de la diana!

El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, fue ayer objeto de un nuevo ataque, y sigue en el punto de mira del independentismo

15 de Noviembre de 2018
¿Quién protege a Llarena de los desalmados? ¡Está en el centro de la diana!
¿Quién protege a Llarena de los desalmados? ¡Está en el centro de la diana!

El portal de la casa de Llarena amaneció ayer inundado de pintura amarilla, la última acción de los radicales catalanes en su campaña de acoso contra el juez que investiga la implicación de los líderes separatistas en el golpe de Estado perpetrado en Cataluña.

El de ayer es el último de los numerosos ataques y escraches que ha sufrido Pablo Llarena durante el último año. Sin embargo, lo más sorprendente del caso, es que el acoso al juez Llarena no se ha saldado con ningún detenido.

Así es, aunque parezca imposible, y mientras el ministro Fernando Grande-Marlaska insiste en que "no ha fallado ningún protocolo de seguridad", ningún violento ha sido detenido por sus repetidos ataques al juez del Supremo.

En la Alemania nazi se marcaba con estrellas a los judíos "ahora se lanza pintura amarilla para señalar el domicilio de un juez"

Ciudadanos ha presentado una denuncia ante la Fiscalía contra Arran por un delito de odio sobre el juez Llarena, y la Asociación Profesional de la Magistratura ha querido recordar algunos hechos que ocurrieron en la Alemania nazi: "Como las estrellas amarillas con las que se trató de marcar a los judíos, ahora se lanza pintura amarilla para señalar el domicilio de un juez".

Pero las amenazas vienen de lejos, y la realidad es que nadie hace nada…

En marzo de 2018 apareció una pintada frente a la casa que tiene Llarena en los pirineos catalanes: "Llarena, feixista! Los Países Catalanes serán tu infierno", escribieron los radicales de Arran, las juventudes de la CUP

Además, desde Arran reivindicaron el ataque en Twitter, pero nadie hizo nada al respecto para sancionar a los violentos.

"Llarena, aquí no eres bienvenido", rezaban carteles en la localidad gerundense de Das. Entonces, la Fiscalía Superior de Cataluña pidió protección para Llarena y su familia. 

Los Mossos d'Esquadra también han investigado las pintadas y amenazas que Llarena sufrió durante esos días, pero no se produjo ninguna detención.

En julio el acoso subió de tono. Vía Twitter, los radicales independentistas ubicaron al juez Llarena en un restaurante de Palafrugell (Gerona), y se reunieron en torno al establecimiento. Al salir de la cena, Llarena y su mujer sufrieron un nuevo escrache. 

"Venían de cacería contra Llarena. Algunos de los CDR iban con medio cuerpo fuera de la ventanilla. Nos buscaban como a alimañas", describieron algunos de los testigos. 

¿Qué más tiene que ocurrir? ¿Quién protege al juez Llarena de los comandos separatistas?