En plena crisis económica provocada por las medidas para frenar el Covid-19, y con las comunidades autónomas aún actuando de forma prudente para avanzar en la desescalada, el Gobierno de España ha dado este viernes la sorpresa de anunciar la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a partir del 1 de septiembre.
Una subida de 15 euros que, sin embargo, ha sembrado la polémica, ya que la decisión se ha tomado sin el consenso de todos los colectivos presentes en la negociación.
Entre ellos, la Confederación Española de Organizaciones (CEOE) cuyo presidente, Antonio Garamendi, no ha dudado en cargar contra la decisión del Ejecutivo, en declaraciones a Onda Cero, recogidas por Europa Press.
"La decisión estaba ya tomada" ha criticado Garamendi al Ejecutivo, asegurando que el Gobierno "lo único que ha hecho es darle vueltas a su propio solitario" para acabar tomando una decisión unilateral "en clave política, y no de un planteamiento serio".
El Gobierno no podrá controlar el precio de la luz hasta otoño
Así pues, Garamendi ha asegurado que la CEOE ha rechazado "en estos momentos" la subida del SMI, debido, principalmente, a la difícil situación económica que atraviesa el país debido al Covid-19.
"Nuestra posición es que en estos momentos no [...] el SMI ha subido un 30% en los últimos tres años. Con la que está cayendo, la pandemia... es un momento muy delicado" ha defendido.
Un momento delicado que afecta, principalmente, a las pequeñas y medianas empresas, las cuales se verán gravemente afectadas por esta nueva exigencia económica, augurando Garamendi un aumento de la economía sumergida y una nueva destrucción de puestos de trabajo en las pequeñas empresas, principal eje del tejido empresarial español.
Yolanda Díaz defiende la decisión
Del mismo modo, el presidente de la CEOE ha criticado que, mientras se exige este nuevo esfuerzo a las empresas españolas, las administraciones públicas no contemplan estos incrementos en sus adjudicaciones. "Yo lo resumo en la frase: te invito a cenar, pero pagas tú" ha explicado.
Sin embargo, las críticas públicas de la CEOE han caído en saco roto, ya que el mismo viernes, la vicepresidenta segunda del Gobierno, y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, remarcaba su "satisfacción" ante el acuerdo.
"No sé si hablo claro, no negociando se pierde" ha apostillado la podemita "Ustedes saben que la ministra de Trabajo estuvo dispuesta a pactar una cuantía inferior a la que hoy tenemos. A veces, no pactando se pierde" ha sentenciado.
Bildu quiere exterminar el castellano de los colegios vascos con el beneplácito de Sánchez
Así pues, la podemita ha remarcado que en las negociaciones sí "hubo diálogo social", pero que la CEOE "no negoció". "Entraron en la mesa diciendo que querían cero, y han salido con cero".
"Seguiremos protegiendo a las empresas y trabajadores, sin ninguna duda" ha destacado la vicepresidenta, desoyendo así las advertencia de Garamendi sobre las terribles consecuencias económicas que esta subida del SMI podría tener en el debilitado entramado empresarial español en estos últimos meses de 2021.