Pablo Iglesias, exlíder y cofundador de Podemos, sigue jugando un papel muy importante en Podemos. De hecho, se puede asegurar que sigue dirigiendo el partido, aunque formalmente no esté dentro de la cúpula organizativa, él sigue siendo quien toma las decisiones de peso en el partido morado.
El podemita sabe que su formación se juega mucho en los comicios presidenciales de final de año, y es por ello por lo que trata de trabajar de forma anticipada en todos los posibles escenarios políticos posibles. No quiere que le pille el toro ni dejar ningún cabo suelto.
La importancia de ‘Sumar’
Yolanda Díaz y su formación ‘Sumar’ son el principal rival de Podemos en las elecciones del final de año. Pese a que ambos partidos comparten espacio político, lo cierto es que la actual ministra de Trabajo supone una amenaza para los morados, que podrían ver como todo lo construido en estos años se va a pique, ya que sus votantes pueden pasar a formar parte de Sumar.
Desde Podemos han iniciado una cruzada contra Díaz. La presionan, insisten en que se arrodille ante ellos, lo hacen porque saben que solo dominándola se garantizarán ser la principal fuerza política a la izquierda del PSOE.
No obstante, entre tanta hostilidad, ha surgido un pequeño rayo de luz, o al menos, así lo quiere Iglesias. Y es que el ‘líder en la sombra’ de Podemos utiliza a Lilith Verstrynge, actual secretaria de Organización de Podemos, para tratar de crear un mínimo de conexión con Sumar, ya que ni Irene Montero ni Ione Belarra están por la labor.
Verstrynge y Colau son muy amigas. Colau ha jurado ya lealtad a Yolanda Díaz, así pues, esta conexión puede ser muy positiva en las relaciones de Podemos y Sumar. Iglesias ha encontrado en la secretaria de Organización de su partido el nexo que necesitaba con Yolanda Díaz. Es una de sus últimas oportunidades de no desaparecer.
