Alberto Núñez Feijóo no ha conseguido los apoyos necesarios en la primera de las votaciones de la sesión de investidura que se celebró en el día de ayer. “Únicamente” obtuvo 172 escaños, a tan sólo cuatro de la mayoría absoluta. Todavía le queda la votación del viernes en la que sólo tendría que obtener más síes que noes.
Sin embargo el resultado podría haber sido distinto debido a la anécdota de la jornada de ayer en el hemiciclo. Uno de los diputados del PSOE, en concreto el diputado por Teruel, Herminio Rufino Sancho Íñiguez, ha respondido “sí” a la investidura de Feijóo, algo que ha provocado las risas en el hemiciclo.
Sin embargo en lugar de haber quedado en un simple error, sin más consecuencias en el cómputo final, desde la mesa del Congreso se ha hecho todo lo posible para que el diputado pudiera rectificar su voto. La secretaria segunda, también socialista, Isaura Leal, tras escuchar la respuesta de su compañero, en lugar de repetir el voto, ha pronunciado un “¿perdón?”, muy esclarecedor. Tras ello, y en mitad del revuelo y las risas, la secretaria se ha girado hacia la presidenta del Congreso, Francina Armengol, y algo han acordado, ya que inmediatamente, Armengol ha mandado callar al hemiciclo y le ha devuelto la palabra a la Secretaria de la mesa.
Leal ha retomado la palabra diciendo, “Disculpen por favor, he pronunciado mal su apellido”, lo volvió a nombrar y esta vez sí, Herminio Rufino Sancho Íñiguez, votó que “no”. La cuestión no es relevante como decimos, porque el número final de apoyos no determinaba nada distinto. Sin embargo en otra ocasión la mesa del congreso no permitió rectificar un error en la votación.
En otra ocasión no se actuó igual
El día 3 de febrero de 2022, la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo Yolanda Díaz, se jugaba mucho con la reforma de la Ley Laboral. Una reforma que acudía al Congreso sin tener los apoyos necesarios para que saliera adelante. Cuando la Presidenta del Congreso, Meritxell Batet, hizo el recuento de votos, y tras un primer error, salió un escaso “Sí: 175 votos, No: 174”. El voto que había decantado la balanza provino del diputado del PP, Alberto Casero, que cometió un error al votar telemáticamente.
Casero votó a favor de la convalidación de la reforma y en contra de su tramitación como proyecto de ley, justamente al contrario de lo establecido por el PP. Sin embargo, antes de la votación presencial, se lo comunicó a la portavoz del PP en las Cortes, Cuca Gamarra. El PP lo comunicó inmediatamente a la presidenta de la Cámara de la equivocación. Sin embargo, Batet declinó realizar una nueva votación. Igual que en el día de ayer.