Estaba muy delgada y estaba hambrienta. Una buena persona escucho un gemido y entró en la casa, cuando vio al perro le saltaron las lágrimas. La abrazó y le prometió no dejarla nunca más sola.

Binán estaba asustada. La cogió en brazos y notó que se le clavaban los huesos. ¿Quién permitió que llegara a este estado?

Laura R. Patermann
Periodista
16 de Abril de 2024
Binán empezó a sentirse mejor Estaba muy delgada y estaba hambrienta.
Binán empezó a sentirse mejor Estaba muy delgada y estaba hambrienta.

Llevó la perra al veterinario y dijo que estaba muy enferma. Empezó el tratamiento y le dio comida en pocas cantidades para que su estómago se acostumbrara.

Tenía heridas en la patas y se las curaron. Binán empezó a sentirse mejor y poco a poco aumentaba de peso.

Cuando la sacaban a pasear, movía la cola y le gustaba que la acariciaran. Parecía otra perra, incluso jugaba con los otros perros.

A Binán la adoptó una buena familia. La adoran y allí será feliz y nunca más pasará hambre, ha tenido el final que se merecía.