Después de este horrible ataque, Maut se quedó durante días sin ayuda, sufriendo sola mientras intentaba cuidar a sus cachorros.
Se quedó con sus bebés y no quería dejarlos. Ni siquiera puedo imaginar el dolor que sentía. Afortunadamente, una señora la vio y pidió ayuda.
Sus quemaduras del lomo se curaron, las de la cara han quedado para siempre.
Afortunadamente se recuperó y ella y sus cachorros encontraron un buen hogar para vivir.