Alguien lo había abandonado: era un cachorro, tenía los ojos enfermos y estaba muy débil

Tenía un dolor terrible y lloró mucho cuando lo encontró. No podía abrir los ojos y su estado era muy grave. En cuanto lo cogió en brazos se quedó profundamente dormido.

Laura R. Patermann
Periodista
24 de Marzo de 2023
https://youtu.be/WJrvfrDnXWE

Le puso de nombre Bodoque. Después de dos semanas de tratamiento pudo abrir un poco los ojos.

La piel de su cara era como de cartón. Le "presentó" a uno de sus perros y lo acogió con mucho cariño. Se lo comía a besos.

Poco a poco su piel fue mejorando y ya tenía el aspecto de un perro. Era muy pequeño y juguetón, ya se comportaba como un cachorro y tenía ganas de jugar.

Bodoque y su otro perro se han hecho grandes amigos y se pasan el día jugando. Los dos estamos contentos con la llegada de Bodoque. Es un ángel en nuestras vidas.