A Pedro Sánchez le crecen los enanos en el circo de su gobierno. Después de las dimisiones del ministro de Cultura Màxim Huerta, que solo resistió seis días en su cargo como consecuencia de un fraude fiscal entre 2006 y 2008, y de la ministra de Sanidad Carmen Montón, por las irregularidades del máster que cursó en la Universidad Rey Juan Carlos en 2011, la próxima dimisión (o cese) planea sobre la caneza de Dolores Delgado, la ministra de Justicia. Ha mentido afirmando que no conocia al excomisario José Villarejo y ha mostrado su carácter homófobo llamando "maricón" al ministro del Interior Fernando Gande-Marlaska.
La ministra llama "maricón" a su compañero de gabinete
El escándalo lo ha destacado Moncloa.com a través de las grabaciones obtenidas en una comida en el restaurante Rianxo de Madrid compartida por la ministra con Villarejo, el exjuez Baltasar Garzón y Enrique García Castaño, imputado en la Operación Tándem. En esa conversación puede oirse a la ministra admitiendo que prefiere a los "tribunales de hombres" porque "a mí que me den un tribunal de tíos. Y no me llevo mal con las tías. Pero de tíos, que justamente sé por dónde van. En cada gesto, en cada cosa. Sé por dónde van”.
Estas manifestaciones fueron hechas por Dolores Delgado degustando un orujo blanco en vaso helado en octubre de 2009. En esa comida el comisario García Castaño le dice a la actual ministra: "Lola, a esta mariscadita y estas cositas [risas] nos invita el señor Villarejo porque le han dado una medalla...( se refiere a una condecoración recibida de Rodríguez Zapatero)"
La polémica conversación en el restaurante Rianxo
.@Moncloa_com revela nuevos detalles de las conversaciones entre la ministra de Justicia y Villarejo. El Gobierno habla de "chantaje" por parte del excomisario