“¿Cómo voy a entenderle?”, se preguntaba la madre primeriza Ana Lagunas en 2016.
Tras probar varias apps que supuestamente interpretaban el llanto de los bebés, esta científica española de datos en BBVA Data&Analytics se propuso hacer ella misma una aplicación que sirviese como traductor de bebés.
"Había trabajado en traducción automática, y el llanto del bebé no deja de ser otro medio de comunicación oral. Además, si Jane Goodall comprende el lenguaje de los chimpancés, ¿por qué no intentar traducir las necesidades de un recién nacido con un algoritmo?", explica Lagunas al diario El País.
Ana Lagunas empezó a grabar a su hijo hasta que reunió 65 audios con lloros
La científica recurrió a los espectogramas y etiquetó cada tipo de lloro: dolor, hambre, sueño, ganas de mimos… ¡Como ya predijo la famosa serie de televisión Los Simpson!
Etiquetas que deben poner primero los padres correctamente para que el algoritmo pueda reconocer los patrones.
Sin embargo, la pequeña muestra únicamente sirvió para que el algoritmo detectase si el bebé lloraba porque tenía hambre o por otra cosa.
Ahora Lagunas vuelve a estar embarazada y podrá aumentar su base de datos. (Una anciana con alzheimer pasa varios días en casa con el cadáver de su hijo)
Además, la científica española ha creado una ONG para hacer trabajos de datos en los que otros bebés puedan colaborar.
Aquí podrán subir los audios de sus bebés de menos de 6 meses para colaborar con su revolucionario estudio.
“Suena a madre chiflada, pero soy la primera madre que quiere que su hijo llore”, sentencia la científica española Ana Laguna Pradas.
Chatterbaby
La neuropsicóloga computacional de UCLA (Universidad de California en Los Ángeles), Ariana Anderson, ha sacado junto a su equipo una App (Chatterbaby) disponible en Android y iPhone que da un porcentaje con el motivo más probable de llanto.