Buenas noticias para los dos astronautas, Alexéi Ovchinin y Nick Hague, que viajaban el interior de la nave Soyuz MS-10. Ambos han podido ser rescatados por los equipos de salvamento y se encuentran en buen estado, según ha informado la NASA.
"El equipo de rescate ya localizó a la tripulación. Los médicos no detectaron lesiones ninguno de los dos", transmitía una fuente rusa.
Los astronautas han realizado un aterrizaje de emergencia en Kazajistán, después de un fallo en el cohete con destino a la Estación Espacial Internacional (EEI).
LA NASA ha informado que se ha producido un problema en el motor y que la tripulación ha regresado a la Tierra en una "trayectoria balística", un poco más abrupta de lo habitual, ya que los astronautas habrán experimentado fuerzas mayores de las que están acostumbrados a soportar.
Abortamos misión
Ambos astronautas, tanto el ruso Ovchinin como el estadounidense, Hague, debían pasar seis meses en la Estación Espacial Internacional como parte de la expedición 57.
El lanzamiento exacto de la nave se produjo a las 8.40 GMT, hora que ya habían estipulado la NASA y la agencia espacial rusa Roscosmos.
Unos minutos después del despegue, el cohete ha experimentado un fallo en uno de sus propulsores, hecho que ha provocado el aborto de la misión.
Así entonces, la cápsula Soyuz, en la que viajaban los astronautas, se ha separado del cohete y ha regresado a la tierra, aterrizando con éxito de nuevo en Kazajistán a las 9.00 GMT.