El presidente francés Emmanuel Macron quiere aplacar a los chalecos amarillos reconociendo sus errores y aplicando una serie de medidas sociales.
El presidente francés se dirigió a los chalecos amarillos, un movimiento que expresa el malestar de las clases medias empobrecidas, con el objetivo de frenar sus acciones.
Macron anunció una subida del salario mínimo de cien euros. De esta forma, tiende una mano a los franceses que cuentan con dificultades para llegar a final de mes.
"La cólera que hoy se expresa es justa en muchos aspectos", explicó el presidente francés en un discurso desde el palacio del Elíseo.
Emmanuel Macron entonó el 'mea culpa' durante el discurso que duró 13 minutos. "Sé que a veces he herido a algunos de vosotros con mis palabras".
El presidente francés recurrió a un gesto de humildad para intentar reconectar con los franceses a los que ha irritado con sus palabras en el último año y medio.
Medidas sociales
La subida del salario mínimo es la medida más significativa. A día de hoy, el salario mínimo en Francia es de 1.498,47 euros brutos y 1.184,93 euros netos.
Además, las horas extra estarán exentas de impuestos y contribuciones sociales. En esta línea, el Gobierno pedirá a los empresarios que ingresen a los trabajadores una prima de fin de año libre de impuestos.
Por último, el CSG, un impuesto para financiar la protección social, se verá reducida para los jubilados que cobran menos de 2.000 euros al mes.