El Real Madrid perdió este sábado ante el Cádiz en un partido para olvidar. Los blancos no dieron la talla y los gaditanos se llevaron merecidamente los tres puntos de Valdebebas. La derrota vuelve a demostrar que los de Zinedine Zidane no son un equipo fiable y que la desgana, la apatía y la falta de gol son problemas muy serios en este equipo. Sin embargo, el entrenador francés no solo vio cosas negativas. También hubo cosas buenas.
Según ha podido saber DonDiario, Zinedine Zidane se marchó muy enfadado del vestuario, pero quiso destacar el trabajo de dos futbolistas por encima del resto a pesar de la derrota: Eder Militao y Luka Jovic.
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El técnico cogió aparte a ambos futbolistas para hablar con ellos y transmitirles que están en la línea a seguir para volver a tener protagonismo en los próximos partidos e incluso hacerse con la titularidad a medio plazo.
Ambos son jugadores que necesitan confianza, que necesitan el mimo del entrenador, sentirse queridos y valorados para seguir haciendo las cosas bien dado que su papel en el equipo es secundario desde que aterrizaron en Chamartín.
El partido de Militao y Jovic
Respecto al brasileño, que entró tras la lesión de Sergio Ramos, estuvo seguro, sólido y no dio lugar a que el Cádiz pudiera matar el partido en algún contragolpe. Militao lleva tiempo demostrando que es un central de mucho nivel y que puede ser, con el paso del tiempo, un jugador titular en el mejor club del mundo. Su velocidad y su capacidad de anticipación volvieron a quedar patentes.
Sobre Jovic, Zidane valoró mucho que la única gran ocasión que se le presentó en los 15 minutos de partido que jugó fuera para dentro. El serbio marcó el gol del empate, pero fue anulado por fuera de juego previo de Karim Benzema.
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A pesar de todo, Zizou quiso felicitar a Jovic y transmitirle su confianza una vez más después de una semana que ha sido difícil para él. De hecho, todo ha sido muy complicado para él desde que llegó al club blanco, pero poco a poco tiene que conseguir su sitio.
De este modo, no todo fueron malas noticias. Zidane se marchó cabreado con jugadores como Marcelo, Isco o Lucas Vázquez, que perdieron una gran oportunidad para reivindicarse. Nadie estuvo bien, pero los casos de estos tres jugadores, que son menos habituales y deberían salir al campo a morder, fueron los más flagrantes en lo negativo.