El piloto asturiano Fernando Alonso sigue haciendo historia en el mundo del motor tras ganar las 24 horas de Daytona dando una auténtica exhibición de conducción.
Fernando Alonso fue muy superior a sus tres compañeros de equipo pero también demostró estar varios escalones por encima de sus rivales sobre el asfalto. (Fernando Alonso se marcha asqueado de la Fórmula 1)
A falta de 22 horas para el final de la carrera, Alonso se puso por primera vez a los mandos del Cadillac. En ese momento ocupaba la octava plaza.
La estrategia de Fernando Alonso no falló y empezó a adelantar oponentes hasta colocarse líder de la mítica carrera por primera vez.
Quince minutos después, Alonso les sacaba veinte segundos a sus perseguidores pero una bandera amarilla puso fin a la ventaja. A pesar de ello, el asturiano no tiró la toalla y volvió a conseguir una renta de 20 segundos poco después.
A falta de 9:45 se subió de nuevo al coche, que estaba en tercera posición. En un primer momento cayó a la cuarta plaza y estuvo a punto de ser doblado pero se recuperó y redujo la diferencia a 35 segundos. Posteriormente, una bandera de amarilla le volvió a colocar en la lucha y 45 minutos después estaba liderando la carrera. (Fernando Alonso se va (pero no del todo) de la Fórmula Uno)
Las últimas horas fueron las más complicadas
Fernando Alonso fue el encargado de hacer el último relevo y a falta de tres horas se subió de nuevo al Cadillac aunque la lluvia y las constantes banderas amarillas hicieron de este tramo el más complicado.
El asturiano volvió a ponerse líder justo antes de la bandera roja final, marcada por la intensa lluvia y los numerosos accidentes.