Cataluña es, junto a otras muchas comunidades autónomas españolas, una de las regiones europeas más afectadas por el coronavirus, con un déficit económico que dificulta enormemente la recuperación económica de la autonomía catalana y el fortalecimiento del sistema sanitario.
Sin embargo, luchar contra la pandemia parece no ser una de las preocupaciones del president de la Generalitat, Quim Torra, que parece centrar todos sus esfuerzos en sus intereses independentistas, a pocas semanas de ser presumiblemente inhabilitado.
Intereses en los que también se encuentra la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), que cuenta con los fondos autonómicos para llevar a cabo sus proyectos de televisión y radio, fieles al independentismo de Torra y Puigdemont.
Así pues, la CCMA ha informado de que gastará 1.040.600 euros en una nueva delegación de TV3 y Catalunya Ràdio en Estambul, Turquía.
Debido a la destrucción de la sede catalana en Beirut, que se vio gravemente afectada por la explosión del 4 de agosto, la CCMA ha publicado un contrato de adjudicación, cuyo concurso estará disponible hasta el 2 de octubre, que establece la construcción de la nueva delegación turca de la televisión catalana.
En concreto, el contrato tendrá una duración de dos años, prorrogándose automáticamente por anualidades, hasta un máximo de cuatro años. El presupuesto del primer año es de 430.000 euros, subiendo a 520.000 con el IVA. En total, en dos años, el gasto será de más de un millón de euros.
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Otro millón de euros para la delegación china
Los recursos económicos de la CCMA no se limitan, sin embargo,a la nueva sede de los medios catalanes en Estambul.
Según ha publicado la propia Corporación, también se establece un nuevo contrato de servicio de producción en la sede de Pekín. Un contrato que mantendrá las condiciones que ya tenía la sede de Beirut, y que vence este mes de septiembre.
El valor de este segundo contrato es de 940.000 euros que, sumando el IVA, alcanza la cifra de 1.140.000 euros. Es decir, que ambas delegaciones costarán a los catalanes más de dos millones de euros en los próximos dos años.