El presidente de la Generalitat, Quim Torra, no se enteró del acuerdo que cerraron los expresidentes catalanes Artur Mas y Carles Puigdemont en Waterloo.
El pacto para entregar la Diputación de Barcelona a la socialista Nuria Marín lo cerraron los dos políticos independentistas hace 15 días a espaldas de Torra. (Torra ya es un cadáver político)
El presidente catalán, molesto por esta situación, se enteró del acuerdo que cerraron Mas y Puigdemont a través de una filtración de los medios de comunicación.
Para Puigdemont, esta decisión responde al odio que siente por Esquerra en general y por Oriol Junqueras. También el factor personal influye en la política.
Además, los socialistas le ofrecieron mantener y eventualmente ampliar el contrato de 6.000 euros mensuales con su esposa, Marcela Topor, por presentar un programa semanal en la red de televisiones locales que dependen de esta institución.
Con estas acciones, el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, que residen en Waterloo para evitar enfrentarse a la justicia española, ha roto "la unidad del independentismo". (¡¡El Govern del vicario Quim Torra aguantará hasta la sentencia del Procés!! ¡¡¡No se sostiene sin Presupuestos!!!)
El pacto con los socialistas
Para Artur Mas, el pacto con los socialistas es el principio de una estrategia de más largo alcance. La Diputación será un banco de pruebas para futuros acuerdos que pueden afectar a la Generalitat.
Tanto para Puigdemont como para Mas, Quim Torra es un empleado menor que además no entiende de política, y consideran que su cometido no es entender las cosas sino obedecer las órdenes.