¡¡La ciencia explica por qué a unas personas les gustan los perros y a otras no!!

Según un reciente estudio, la genética de cada individuo es la responsable de nuestro amor o desapego hacia los acompañantes caninos.

09 de Agosto de 2020
¡¡La ciencia explica por qué a unas personas les gustan los perros y a otras no!!
¡¡La ciencia explica por qué a unas personas les gustan los perros y a otras no!!

¿Eres de los que considera que un perro es tu mejor amigo, pero con cuatro patas? ¿O tal vez de los que no soporta su presencia cuando estás en una terraza?

A partir de ahora, sea cual sea tu inclinación (a favor o en contra de los perros), puedes poner como excusa a tus genes.

¿A qué juegan? ¡¡Estos dos perros se acaban de inventar un nuevo y divertido juego!!

Y es que un nuevo estudio, llevado a cabo por científicos suecos y británicos, ha determinado que el amor por estos animales viene determinado por nuestro ADN, teniendo un claro componente hereditario. 

El experimento ha sido realizado con 35.000 parejas de hermanos genelos, los cuales han coincidido más en su gusto (o disgusto) canino que los hermanos mellizos.

Sin embargo, aún no se ha determinado qué genes exactos son los que nos hacen ser aficionados a estos acompañantes de cuatro patas, y si esto está relacionado con posibles alergias. 

Demostrado: tener mascota mejora la salud

Según los expertos, los propietarios de estas mascotas reducen en un 33% las probabilidades de muerte a partir de los 40 años, y hasta un 11% la posibilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular.

Se presume que es por el aumento de actividad física que acompaña tener a un perro en casa, y la más que probable actividad social que supone sacar a pasear a tu mascota, dado que aumentas tu contacto personal con otros propietarios. 

Además, según el investigador Sadahiko Nakajima, cuando elegimos a nuestro amigo canino, lo hacemos fijándonos en sus características físicas. Según el investigador, buscamos insconscientemente rasgos que nos resulten familiares, y acabamos seleccionando los que más nos recuerdan a nosotros mismos. Va a ser cierto eso de que los perros se parecen a sus dueños.