El concejal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Josep Bou, ha defendido este miércoles que Rafael Casanova era un "gran españolazo" y ha acusado al independentismo de intentar apropiárselo.
Lo ha dicho tras asistir a la tradicional ofrenda floral al monumento de Rafael Casanova con motivo de la Diada: ha ido a la ofrenda de la delegación institucional del Ayuntamiento, y después ha hecho una por su cuenta, pese a que el PP no participa en este acto.
Aquelarres independentistas
Bou ha recriminado los "aquelarres independentistas" que considera que se hacen por la Diada y ha pedido que esta celebración no sea solo del nacionalismo catalán, sino de toda Cataluña.
A pesar de ser considerado un icono de la resistencia catalanista durante la guerra de sucesión contra el Borbón Felipe V, Rafael Casanova, abogado y político catalán que ejerció de ‘conseller en cap’ entre 1713 y 1714, recibió años más tarde el perdón real después de haber combatido en favor de los intereses de Carlos de Austria.
Cuenta la leyenda que Casanova fue un ferviente defensor de Cataluña frente a la invasión borbónica, pero la realidad es que despeñó a Cataluña hacia el abismo al negarse a aceptar el acuerdo que le ofreció el Duque de Berwick, militar al mando de las tropas borbónicas, de firmar un acuerdo que evitara los muertos que se iban a producir en Barcelona entre sus defensores.
Casanova no ignoraba que la desigualdad de fuerzas jugaba en su contra y a pesar de eso, de forma suicidia y sabiendo que la resistencia era imposible, condujo a una auténtica masacre de bajas a la resistencia de la ciudad condal durante una lucha estéril.
A ese militar cada año se le rinde homenaje en la Diada por sus "dudosos" méritos. De hecho, estudios recientes sobre el personaje revelan que aunque se decantó por el candidato austríaco, nunca cuestionó la unidad de la corona. Y por ahí va la afirmación de Bou sobre el "gran españolazo" que fue.