Belén Esteban y Miguel Marcos forman una de las parejas más estables, en teoría, del mundo de la televisión. La colaboradora de Sálvame y su marido son felices y hasta hace bien poco han estado buscando tener un hijo en común. Sin embargo, tal y como confesó la de Paracuellos, los intentos han cesado y ahora está más centrada en su trabajo y en sus negocios que en esa posibilidad.
Se trata de un asunto que desata polémica debido a la diferencia de edad entre ambos y al hecho de que Belén Esteban sí es madre, pero Miguel Marcos no ha tenido esa oportunidad. ¿Qué futuro tiene una relación con esa evidente desigualdad entre los dos miembros de la pareja? Belén quería darle un hijo a su marido precisamente por eso, para estar en igualdad, pero los rumores sobre un posible divorcio ya planean tras darse a conocer la noticia de que han dejado de intentarlo.
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Miguel Marcos tiene 34 años, es 14 años más joven que Belén Esteban, y si la colaboradora de Sálvame no se queda embarazada tendrá que elegir entre pasar la vida al lado de ella sin saber lo que es ser padre (salvo que decidieran adoptar o tener un hijo por otras vías) o romper la relación, algo que muchos consideran que puede llegar a suceder.
Los antecedentes, desde luego, no son demasiado optimistas para Belén, que hace unos años fue víctima de una dolorosa infidelidad por parte de su pareja cuando se encontraba participando en Gran Hermano VIP. Si a la mínima de cambio decidió irse con otra, si se da cuenta de que quiere ser padre y de que no puede serlo al lado de su actual pareja, las cosas pueden acabar muy mal. No sería la primera pareja que rompe su relación por circunstancias de este estilo.
Belén Esteban lo ha pasado muy mal
Lo cierto es que Belén Esteban lo ha pasado realmente mal durante todo este tiempo porque quiere hacer feliz a Miguel y también porque conoce las consecuencias que puede traer el no poderle dar un hijo a su joven marido.
Sin embargo, la edad de la colaboradora de Sálvame y sus circunstancias de salud desaconsejan que Belén Esteban siga adelante con la aventura de volver a ser madre. Su hija, Andrea Janeiro, nunca fue partidaria, y el propio Miguel Marcos le ha asegurado por activa y por pasiva que pase lo que pase todo va a seguir siendo como hasta ahora en su relación. La cuestión es que muchas mujeres en las circunstancias de Belén entenderían que su marido, si tiene el deseo de ser padre, decidiera poner fin a su matrimonio.
Miguel Marcos se ha comportado siempre con Andrea Janeiro como un padre y siente mucho cariño por la hija de Belén, pero no es su hija y, para colmo, ya está más que criada. Sería diferente si todavía fuera una niña, pero no es el caso.
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El fracaso del matrimonio a la hora de darle un hermanito a Andrea se ha convertido en una de las comidillas en las redes sociales en las últimas horas, y la sombra del divorcio planea sobre la relación de la 'princesa del pueblo'.