El actor Robert de Niro interpuso una querella en el mes de agosto a una exempleada de su empresa Canal Productions.
De Niro le pide 6 millones de euros por haber cargado miles de dólares en una tarjeta de la compañía y por ver series de Netflix en horas de trabajo. En dicha tarjeta de crédito había gastos que superaban los 12.000 dólares en restaurantes y 32.000 en viajes de taxi y Uber.
Ella contraataca
No hay nada mejor que defenderse contraatacando por eso, Graham Chase Robinson ha presentado una demanda ante el Tribunal federal de Nueva York.
La demanda interpuesta contra el actor ha sido por acoso y discriminación de género.
Y es que la exempleada asegura que de Niro le sometió a "contactos físicos no deseados" y le dedicó comentarios ofensivos hacia su persona además de obligarle a hacer tareas domésticas que no se les requería a empleados masculinos.
Se muestra firme al decir que de Niro le obligó a rascarle la espalda, abrocharle camisas o hacerle la colada.
Robinson le pide 12 millones de dólares, unos 11 millones de euros, por salarios perdidos y daños. Además, junto a la denuncia ha añadido un mensaje de voz que, supuestamente, el actor le mandó a su teléfono.