La patronal de grandes constructoras y concesionarias, Seopan, realizó una propuesta el pasado lunes que seguramente traerá cola.
Concretamente, la propuesta de la agrupación constructora se ha basado en la implementación de peajes inteligentes para acceder y salir de las grandes ciudades, como Madrid o Barcelona.
Esta medida tiene como objetivo reducir la congestión y la contaminación, y aportar fondos para facilitar a las administraciones que afronten inversiones en infraestructuras de una magnitud superior.
Los peajes inteligentes consisten en el cobro variable y electrónico de una cantidad teniendo en cuenta el tráfico en tiempo real, y estableciendo carriles rápidos en los que se asegura una velocidad mínima determinada.
Los precios oscilarán en función de la cantidad de tráfico que haya en ese preciso momento, es decir, que cuanto más tráfico, más caros, y viceversa.
Madrid y Barcelona, conejillos de indias
Estos peajes se pagarán de forma electrónica gracias a una pegatina que los vehículos tendrán que llevar. De este modo, los conductores no tendrán la necesidad de parar el coche al llegar al punto de control.
La propuesta se produce en vista a poder ser aplicada en las dos grandes ciudades de España: Madrid y Barcelona.
Ambas ciudades, gobernadas por formaciones de Podemos, están introduciendo severas restricciones de tráfico en el centro de las ciudades, así que veremos cómo evoluciona la propuesta.
En Texas (EE. UU.) ya se ha ensayado con éxito por Ferrovial en las pobladas autopistas de Dallas.