¿A quién no le ha sucedido alguna vez que al tomar una comida tremendamente deliciosa no ha podido determinar cuál es el sabor predominante?
Y es que a esto es a lo que nos referimos con el sabor umami.
Se trata de un quinto sabor aparte del dulce, salado, ácido y amargo.
Por lo que si estás degustando algo que está exquisito pero no sabes determinar el ingrediente principal, estas teniendo un sabor umami.
Una expresión que a pesar de que no sea muy conocida en el resto del mundo, en la cultura asiática es más que tradicional, ya que lleva un siglo incorporada en su lenguaje.
De hecho, esta palabra es de origen japonés y se creó juntando dos términos que significan delicioso sabor.
Umami sobretodo se utiliza para la escritura a la hora de describir algo, aunque muchos degustadores la usan también para referirse como un sabor único y complejo que se pone en contacto con el paladar en seguida para estimular la salivación y secreción de flujos gástricos que favorecen la digestión.
¿Qué sustancias componen el Umami?
Cada sabor está formado por una sustancia responsable. Por ejemplo, en lo salado está el cloruro de sodio, en lo dulce la sacarosa, glucosa o fructosa y en el umami están el glutamato, el guanilato y el inosinato.
Se trata de una mezcla de sales que provocan un efecto que potencia el sabor y que se puede encontrar en alimentos como el parmesano,las carnes de res, cerdo y aves, los tomates y las setas o también en snacks y sopas instantáneas.