El Real Madrid puede tener un problema muy serio por culpa de Leo Messi y la salida del astro argentino rumbo al Manchester City. Un fichaje de estas características podría generar un efecto dominó que afecte directamente al equipo blanco.
Guardiola y Messi negocian y buscarán la fórmula para que Leo pueda salir del Barcelona por una cantidad razonable, dado que difícilmente los culés permitirán que salga gratis. Sea como sea, en clave madridista la salida de Messi del Camp Nou puede ser perjudicial. Así como tiene ventajas, también tiene inconvenientes.
Los tres grandes beneficios del caso Messi para el Real Madrid
El efecto dominó que puede generar dicha operación es el principal inconveniente, ya que la prensa inglesa no ha dudado en establecer el primer nombre que pulula por las oficinas azulgrana en el caso de que Messi haga efectiva su amenaza: Sadio Mané.
El jugador senegalés del Liverpool se ha convertido en el objetivo número uno del Barça para suplir a Messi en el caso de que se haga oficial su marcha. Esto puede derivar en dos problemas muy serios para el Real Madrid.
Mbappé y Marco Asensio
Y es que si el Barcelona lograra acceder a Sadio Mané con el dinero obtenido por Messi, el Liverpool tendría que reforzarse a su vez y podría ir a por dos jugadores que por nada del mundo el Madrid quiere que se le escapen.
Por un lado, el gran deseado de Zinedine Zidane, Kylian Mbappé, un jugador que en los últimos años ha sido relacionado con el club blanco por sistema. Y por otro lado, Marco Asensio, que es un jugador que encanta a Jürgen Klopp y que ha intentado fichar en varias ocasiones desde que llegó a Anfield.
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En el caso del balear, el Real Madrid lo tiene fácil con decir no. En el caso del francés, en cambio, podría verse obligado a actuar este mismo verano para que Kylian no escuche los cantos de sirena procedentes de Liverpool.
De este modo, la salida de Messi podría no ser tan beneficiosa como parece para el Real Madrid. Florentino y Zidane permanecen alerta, muy atentos a lo que suceda en Can Barça y a las consecuencias que puede traer en el mercado de fichajes un 'movimiento sísmico' de este calibre.