El independentismo catalán siempre ha buscado en Europa el apoyo que no obtiene su proyecto secesionista en España.
Por esto, no fue una sorpresa que Carles Puigdemont y Oriol Junqueras se presentaran como candidatos en las últimas elecciones europeas, pese a que, de momento, no hayan entrado en Madrid para recoger sus actas como candidatos electos (en el caso de Puigdemont, le vence el miedo a ser detenido). (El Parlament vuelve a emplear la censura para acallar las verdades sobre el supremacista Torra)
Y es que los golpistas catalanes saben que necesitan el reconocimiento internacional para poder continuar con su estrategia ilegal. De no obtenerlo en un breve espacio de tiempo, tendrán que admitir que el 'procés' ha perdido la batalla.
Emergen los teóricos del Independentismo catalán
Ramir de Porrata-Doria, ex-empresario y ahora integrante de JxCat, afirma que "si queremos que intervenga Europa e imponga un referéndum, es preciso que Europa vea que el conflicto catalán está perjudicando los intereses de toda Europa, que vea que no es solo un asunto interno español".
Propósito complicado el propuesto por De Porrata, dado que el propio Tratado de la UE, en su artículo 4.2, afirma que "La Unión respetará las funciones esenciales del Estado, especialmente las que tienen por objeto garantizar su integridad territorial".
Ignorando los textos de la Unión Europea, el ideólogo separatista afirma que existen tres vías para culminar, con éxito, el movimiento independentista: ensanchar la base social (indepe), mantener el pulso al Estado, desestabilizando Europa, y , por último, mantener la vía unilateral.
Sin embargo, el propio ideólogo reconoce fallos en su metodología, ya que "muchos unionistas lo son por sentimiento identitario, por lazos afectivos con su amada España. No cambiarán de parecer aunque la Generalitat aplique políticas sociales".
De Porrata coincide con Carod-Rovira
El exvicepresidente del Govern, Carod-Rovira, explicaba en un artículo el pasado 8 de mayo, que los independentistas "hemos de hacer que la intransigencia española constituya un problema insalvable para Europa". Esta afirmación del Expresidente de ERC le vincula directamente con el pensamiendo de De Porrata, creando, tal vez, una nueva línea para un independentismo extranjero agotado y fuera de la ley.