Cristiano Ronaldo fue el hombre del verano en 2018.
Con su fichaje por la Juventus, el astro portugués era el hombre más buscado del planeta.
El paparazzi Antonio Montero viajó a Grecia para intentar sacar alguna fotografía de CR7, que se encontraba de vacaciones con su familia.
Montero consiguió infiltrarse en una familia y fotografiar al astro portugués en una lancha.
Sin embargo, tal y como él mismo explicó en Telecinco, los guardaespaldas de Cristiano cazaron a Antonio Montero haciendo fotos.
El paparazzi explicó que se sintió “secuestrado” y que los escoltas del futbolista lo “amedrentaron y amenazaron” en repetidas ocasiones.