No eran pocos los que confirmaban en las redes sociales que Kim Kardashian se estaba tomando este verano con mucha más calma de los que en ella es habitual.
Y no, no se referían a que la esposa de Kanye West no está todo el día arriba y abajo, sino a que sus publicaciones en sus redes sociales eran mucho menos explosivos que en veranos pasados.
Un argumento que se ha finalizado en las últimas horas. Y es que la empresaria americana parece que ha pretendido dejar muy claro con su última foto que no tiene ninguna intención de dejar de ser una de las celebrities con mayor repercusión mediática y una de las más polémicas.
Kim ha vuelto, y por la puerta grande. Y es que qué mejor forma de callar bocas, de mostrar que no tiene ninguna intención de volverse más ‘blanda’ en ese sentido que apareciendo en su cuenta de Instagram con un bikini tan pequeño que apenas le tapa nada.
El nuevo bikini de Kim Kardashian
No es nada nuevo que Kim siempre ha presumido de curvas, pero hacía ya un tiempo que la americana no despuntaba con una foto que, como era de esperar, lo ha petado. Y de qué manera.
Ni más ni menos que casi 3 millones de 'me gusta' en menos de 17 horas y miles de comentarios.
Comentarios que, además, no han hecho otra cosa que demostrar las ganas que tenían muchos de ver de nuevo a la Kim más auténtica.