El asesinato del niño Gabriel Cruz se produjo con "frialdad estremecedora"

Los letrados que representan al padre y madre del niño lo han manifestado en un escrito.

31 de Enero de 2019
El asesinato del niño Gabriel Cruz se produjo con "frialdad estremecedora"
El asesinato del niño Gabriel Cruz se produjo con "frialdad estremecedora"

Los letrados que representan a la madre de Gabriel Cruz, Patricia Ramírez, y al padre, Ángel Cruz, han escrito un manifiesto en el que hablan de la muerte de su hijo a manos de Ana Julia Quezada.

En el documento, los abogados exponen que el pequeño estaba pasando el puente del día de Andalucía en casa de su abuela paterna en Las Hortichuelas Bajas (Níjar, Almería). ("Ana Julia es como Hannibal Lecter: te mata, te quita los ojos y se los come")

Con él estaba su padre, Ángel Cruz, que tuvo que ausentarse de la vivienda por razones laborales. Después de comer, el menor decidió salir a la calle e "inmediatamente después salió la acusada quien, en ejecución de un plan preconcebido para acabar con la vida de Gabriel".

"Con el pretexto de que lo acompañara a una casa que estaban arreglando en Rodalquilar (Níjar, Almería), lo subió en el coche y se trasladaron hasta la misma", ha rezado el comunicado.

Una vez en la casa, Quezada se aprovechó del “escenario que la acusada se había procurado respecto al niño” y comenzó a “golpearlo reiteradamente, con violencia y con un objeto contundente".

Gabriel quedó "aturdido por la violencia de los golpes y por la superioridad física de la acusada" aunque, según los letrados, podría "haber sido reanimado de haberse solicitado asistencia médica". (Ana Julia pagará los 200.000 euros que costó la búsqueda del pequeño Gabriel)

"Frialdad estremecedora"

Al comprobar que el pequeño seguía respirando, Ana Julia Quezada le tapó la nariz y la boca hasta provocarle la muerte, insistiendo en que desde que lo golpeó y hasta este momento pasaron entre 45 y 90 minutos en los que se "podía haber rescatado la vida" de Gabriel Cruz.

Los letrados que representan a los padres de Gabriel Cruz han insistido en la "frialdad estremecedora" de Ana Julia Quezada, asesina confesa.