Hace escasos días que Netflix ha sacado a la luz un documental que tiene distintos episodios sobre el asesinato de las niñas de Alcásser.
En él se apoyan en la teoria de que Desireé, Miriam y Toñi fueron asesinadas por hombres poderosos en una 'snuff movie'.
La falsa teoría que persigue al crimen de las niñas de Alcásser
En enero del 97, 4 años después de la aparición de los cuerpos de las niñas, Fernando García, padre de una de las niñas, y Juan Ignacio Blanco, periodista y criminólogo, soltaron un bombazo en Cruzando el Missisipi, programa que por aquel entonces iba a cargo de Pepe Navarro.
Aseguraron que los asesinos de las niñas no eran Anglés y Ricart sino que eran hombres con gran influencia política vinculados al PSOE que además se dedicaban a grabar 'snuff movies'.
Dieron nombres y apellidos. Se trataba de Alfonso Calvé, psiquiatra y ex gobernador civil de Alicante; José Luis Bermúdez de Castro, productor de cine, y Luis Solana, ex presidente de Telefónica. A su vez, estos tres hombres formaban parte de un conocido clan, el Clan de La Moraleja.
Juan Ignacio Blanco se atrevió a ir más allá y aseguró que "Forman parte de un conocido clan, el Clan de la Moraleja, que no solamente está implicado desgraciadamente en este tipo de asuntos turbios, sino en bastantes más: tanto el señor Calvé como el señor Solana están investigados por la desaparición de dos toneladas de cocaína".
La teoría conspiratoria ya estaba lanzada y de nada sirvieron las amenazas de querellas sobre el programa ni las disculpas del mismo. La bomba ya había estallado.
A raíz de la serie de Netflix que ha resucitado dicha teoria hay quien se sigue mostrando reticente a lo ya contado. "Más que indignado por el regreso de la conspiración, lo que estoy es muy cansado de Alcàsser. Llevo 25 años tratando de desmentir los bulos de la teoría de la conspiración, pero parece que no hay manera de acabar con ellos", explica Luis Miguel Montero, periodista de El cierre digital.
Una teoría, que sin embargo, tuvo su origen en el rencor de Ángel Sopeña, ex socio de Solana, Calvé y De Castro en una serie de negocios que no terminaron bien. Sopeña se sintió engañado, y por si esto fuera poco siempre tuvo la sospecha de que su mujer le engañaba con De Castro. Así, según los tres socios, nació la teoría descabellada de las 'snuff' movies.