David Goicoechea se describe en su perfil de Linkedin como un cabo de los Mossos d'Esquadra, así como un "director de seguridad integral", y trabajador de la Generalitat de Cataluña con más de 20 años de experiencia.
Sin embargo, es más conocido por haber sido uno de los escoltas que acompañaron a Carles Puigdemont en su huida en coche cuando fue detenido en Alemania en 2018.
Hecho por el que fue llevado ante el Tribunal Supremo, compareciendo y justificando que en ningún momento actuó como escolta del ex president, sino como amigo personal de Puigdemont, al que ayudaba en su mudanza a Waterloo en sus días libres.
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Una 'amistad' que, sin embargo, ha sido muy provechosa para Goicoechea, que ha sido recientemente nombrado como responsable de proyectos estratégicos en la consejería de Derechos Sociales de la Generalitat, con un sueldo especial de más de 30.000 euros anuales.
Una familia siempre cercana al poder
Sin embargo, David Goicoechea no es el único de la familia catalana que ha sabido aprovechar sus 'amistades' y contactos dentro del Govern catalán.
Y es que el afan por servir al independentismo al más alto poder le viene heredado de su padre, Ramón Goicoechea Utrillo, mano 'izquierda', discreta y eficaz, de Jordi Pujol durante su mandato, siendo su asesor de presidencia y hombre de confianza.
Con un sueldo de al menos 80.000 euros anuales, el padre de los hermanos Goicoechea siempre estuvo metido en chiringuitos de la Generalitat, incluido el Programa 2000, del cual Pujol nombró a Goicoechea coordinador general.
Un posicionamiento en las altas esferas que ya viene de largo, ya que la familia es conocda por haber estado posicionada dentro de la alta burguesía franquista, y que ahora, se inclina por el independentismo fugado de Waterloo para mantener su status de riqueza cercano al poder, pero siempre 'en la sombra'.