Según fuentes locales, se escucharon diversas explosiones y dos petroleros sufrieron sendos ataques en el Golfo de Omán, próximo a la costa iraní. Tras los citados ataques, EE.UU. ha culpado a Irán.
Concretamente, los dos navíos atacados han sido el Front Altair (de bandera de las Islas Marshall y propiedad de la empresa noruega Frontline), y el Kokuka Corageous (de bandera de Panamá y operado por la empresa BSM Ship).
Los 44 afectados fueron rescatados
Los tripulantes abandonaron la embarcación y pudieron ponerse a salvo gracias al rescate del barco iraní Naji 10, que condujo a los 44 afectados a la zona de Jask (Irán).
Según la agencia Reuters, el carguero Front Altair, que acabó hundiéndose, transportaba 75.000 toneladas de nafta cuando habría sido alcanzado por un torpedo.
El Kokuka Corageous iba cargado de metanol y consiguió mantenerse a flote aunque envuelto en llamas.
"Hemos sido informados de un ataque contra petroleros en el Golfo de Omán. Las Fuerzas Navales estadounidenses en la región recibieron dos llamadas de socorro por separado", aseguró el comandante Josh Frey, portavoz de la 5ª Flota de la Armada, destinada a proteger los intereses estadounidenses en aguas de la región.
Justo antes, el Departamento de Comercio Marítimo del Reino Unido había informado sobre un “incidente no especificado” en el mar de Omán, por lo que instaba a “extremar la precaución”.
La supuesta actividad agresiva de Irán en la región de Oriente Medio ha provocado inseguridad marítima en la zona y una gran inestabilidad, según ha denunciado EE.UU., entre otros países.
Con cada nuevo ataque se recrudece la situación en Oriente Medio con un enfrentamiento abierto entre Irán y Estados Unidos y Arabia Saudí.