El fichaje del conocido presentador David Broncano por RTVE ha trascendido el ámbito televisivo para convertirse en un tema político candente, especialmente entre los miembros del Partido Popular. Tras las críticas previas expresadas por Alberto Núñez Feijóo, presidente de Galicia, ahora es Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, quien ha cuestionado duramente esta decisión.
Ayuso ha lamentado lo que ella describe como "tejemanejes a espaldas de todos los ciudadanos en RTVE", refiriéndose específicamente a la contratación de Broncano. En sus declaraciones, la presidenta madrileña expresó su preocupación por el uso de fondos públicos para contrataciones millonarias que, según ella, RTVE no puede permitirse y que podrían estar dirigidas a competir con las audiencias de televisiones privadas.
Además, Ayuso ha extendido sus críticas al Gobierno de Pedro Sánchez, al que acusa de utilizar "todas las herramientas del Estado" para mantenerse en el poder a pesar de no tener un respaldo electoral suficiente. Según la presidenta madrileña, esta situación se repite en varios organismos públicos, lo que evidencia, en su opinión, una falta de respeto hacia los ciudadanos.
Muy en desacuerdo con el fichaje de David Broncano
Esta no es la primera interacción pública entre Isabel Díaz Ayuso y David Broncano. En mayo de 2020, Broncano narró una anécdota en la que aseguró haber visto a Ayuso corriendo por las calles durante el confinamiento, aunque con ciertas dudas sobre si realmente era ella. "Me encontré el otro día, que salí a correr sobre las 22.00h, con Isabel Díaz Ayuso. "Aunque no estoy seguro de que fuese ella", puntualizó". "Ella no iba corriendo, iba con una mascarilla y me pareció ver en la mirada que era ella", señaló Broncano, que señaló entre risas que "llevaba una camiseta roja" con la palabra España.
Esta historia, relatada por el presentador, donde se reía de la presidenta ahora cobra un nuevo contexto a raíz de las recientes declaraciones de Ayuso sobre el papel de RTVE y el Gobierno, quien parece guardarle cierta inquina.