La última gala de 'Supervivientes 2024' se convirtió en un torbellino de emociones y controversia debido a unas declaraciones desafortunadas por parte de Arantxa del Sol antes de que se anunciara el nombre del concursante expulsado de la noche. La concursante, visiblemente afectada por un enfrentamiento con Ángel Cristo Jr. y la nostalgia hacia su familia, se vio envuelta en lágrimas mientras compartía sus sentimientos con Jorge Javier.
En un momento de vulnerabilidad, Arantxa mencionó a dos personas clave dentro del concurso en las que confiaba plenamente: Marieta y Claudia. Sin embargo, fue su referencia a Claudia como si ya hubiera sido eliminada lo que desató la polémica. "También estaba Claudia, que la voy a echar de menos muchísimo", dijo Arantxa antes de que se anunciara oficialmente la salida del programa de Claudia.
Este desliz provocó reacciones inmediatas en la audiencia y en sus compañeros de concurso. La sorpresa y confusión se reflejaron en las caras de los demás concursantes, mientras que Jorge Javier intentó corregir la situación diciendo: "Bueno, o no, esperemos a ver precisamente quién se va". Sin embargo, el daño ya estaba hecho.
Arantxa del Sol desvela lo que no debe
En las redes sociales, el incidente se convirtió rápidamente en tema de debate. Muchos espectadores expresaron sus dudas sobre si el anuncio de la expulsión estaba pactado de antemano. Algunos tuiteros sugirieron que Arantxa podría haber sido informada previamente sobre la salida de Claudia, insinuando que el programa estaba orquestando ciertas eliminaciones para mantener cierta narrativa o equilibrio en el concurso.
Esta no es la primera vez que Arantxa del Sol se ve envuelta en una situación similar. Anteriormente, durante otra eliminación, la concursante se despidió anticipadamente de otro compañero, lo que alimentó las especulaciones sobre posibles acuerdos o manipulaciones detrás de cámaras.
El comentario ha puesto en duda la transparencia del programa y ha generado desconfianza entre los seguidores de 'Supervivientes'.