El 11 de julio de 2010, a las 20:30 horas, la selección española disputó la final de la Copa del Mundo contra Holanda en el Estadio Soccer City de Johannesburgo (Sudáfrica).
‘La Roja’ lideró el juego con Xabi Alonso, Xavi e Iniesta en la sala de mandos.
Robben dispuso de las mejores ocasiones para desequilibrar la balanza.
Una final que también será recordada por el juego sucio de Van Bommel, Heitinga y De Jong.
La clamorosa entrada de De Jong sobre Xabi Alonso duele tan solo verla.
También fue la final de la épica parada de Iker Casillas a Robben.
Y el gol de Iniesta en el minuto 113 nos convirtió en campeones del mundo.
Un gol que pone la piel de gallina.
Un día para recordar.